jueves, 8 de julio de 2010

Cuando la imagen corporativa y la realidad se contradicen




Cuando se intenta crear y comunicar una imagen corporativa de corporación limpia, responsable y "verde", haciendo incluso un rebranding del logo de la empresa, pero no se actúa en consecuencia, ¡esa empresa está en problemas! En especial si se trata de una de las corporaciones petroleras más importantes del mundo e intenta detener un derrame submarino de petróleo que lleva meses en plena actividad y que ha perjudicado ya al menos cinco Estados de EE.UU. Sobra decir que la reacción popular ante la situación ha sido de total rechazo, furia e indignación y en este caso, ha sido respaldada por el propio presidente de los EE.UU., Barack Obama. No se trata aquí de atacar o defender el sistema capitalista que muchos deseamos. Se trata de tener planes de contingencia por si algo así sucedía (a lo mejor era poco probable, pero posible), se trata de reacciones rápidas, que eviten perjudicar al medio ambiente y a las especies marinas. Si el preventor de surgencias no funcionó, pues había que saber qué hacer, debió preverse un plan B, incluso un plan C. Pero al parecer nunca se hizo un análisis de riesgos, o bien se obviaron las recomendaciones del análisis, quizás como producto de una política de ahorros frente a la crisis mundial. Solamente estoy especulando, por si acaso.

Por supuesto que la organización ambientalista Greenpeace no podía fallar tampoco en esta oportunidad. Se diseñó incluso un concurso para cambiarle el logo a BP. En Madrid y Londres, intrépidos miembros de esta organización subieron a los edificios de BP en estas ciudades para colocar un nuevo logo de la empresa, donde la flor verde-amarilla estaba parcialmente coloreada de tonos negros y marrones. Inmensas telas pintadas con el logo de BP y mensajes en el centro de la flor: "El petróleo mata...", Greenpeace se ha movilizado como siempre sirviendo de conciencia crítica y descubriendo los desmanes de las empresas que creen que pueden abusar de La Tierra.

¿Nos ponemos a limpiar las aves, los peces? Me parece bien. ¿Recogemos el petróleo con una tubería? También OK. ¿Limpiamos la arena de la playa? Suena bien. ¿Gastamos más de 3.000 millones de $ en labores de limpieza? Pues sí. Pero lamentablemente, cierto tipo de daño no puede repararse: es el daño a los microorganismos marinos que también son parte de la cadena alimenticia. Desde hace años, publicaciones de la SPE (Society of Petroleum Engineers) analizaban el sabor del "tainted fish" debido a derrames petroleros y derrames de fluidos de perforación en el Mar del Norte y otros lugares. ¿Quiere comer pescado con mal sabor? Los mares y océanos no necesitan más basura: petróleo, metales pesados, derrames de químicos, pruebas y desechos nucleares... ¿Sabe que algunos médicos hoy en día le prohíben a las mujeres embarazadas consumir pescados como atunes, peces espada y otros, debido a los niveles de metales pesados que contienen y a los efectos perniciosos que pueden tener sobre el feto humano?

Solamente es curioso, tomando información de una página web de Greenpeace, que BP vaya a invertir este año 19 veces más en energías sucias que en energías renovables, que se haya centrado en biocombustibles que no son sostenibles y que haya abandonando incluso dos plantas que tenía en España para la producción de energía solar. ¿Hay alguna correlación entre el logo de la florecita verde y amarilla con esta realidad?

Por favor, tenga cuidado con lo que le ofrezca a sus clientes. En especial, si es un producto de alto consumo. La opinión pública puede llegar a hacerle mucho daño, recuerde la velocidad de las nuevas tecnologías de información y comunicación y recuerde también algo que se llama el "Word of Mouth" (WOM). La insatisfacción corre más rápido que la satisfacción.





http://www.lavoz.com.ar/ciudadanos/ambiente/por-el-derrame-bp-dice-que-gasto-us-3000-millones

http://www.greenpeace.org/argentina/prensa-rss/accion-greenpeace-espa%C3%B1a-logo-BP